Por Javier Caso Iglesias | Analista Político
Dice el politólogo David Muñoz que "sin investidura de Mariano Rajoy, al no poder alcanzar mayoría simple, y con la negativa del PSOE a encontrar pactos para un Gobierno presidido por Pedro Sánchez, no queda otra que el Jefe del Estado nombre a otro candidato, que no tiene porqué ser un diputado. Aquí entra en juego que sea alguien con quien el PSOE pudiera abstenerse finalmente para poder investir a dicho candidato del PP, quien gobernaría en minoría -solo 123 votos a favor- y con constantes búsquedas de apoyos a la hora de sacar proyectos legislativos adelante".
Esta va a ser la fórmula que tanto PP como PSOE elijan para salvar esta legislatura, pues ir a unas nuevas elecciones generales antes de verano, seguramente entre abril y mayo, sería un suicidio político para ambas formaciones que podrían salir más perjudicadas electoralmente frente a las nuevas alternativas políticas, Podemos y Ciudadanos, que cada día son más apreciadas por el electorado.
Como afirma David Muñoz, toca ir deshojando la margarita e ir viendo lo que los partidos van diciendo, pues sabemos que esto puede cambiar en cualquier instante, pero en este momento parece claro que ni Mariano Rajoy ni Pedro Sánchez van a ser los próximos presidentes del Gobierno, y que si el PP, también el PSOE, quieren evitar la repetición de los comicios del pasado domingo, se necesita presentar otro candidato negociado entre ambos partidos para su investidura con los votos del PP y la abstención del PSOE.
Dice el politólogo David Muñoz que "sin investidura de Mariano Rajoy, al no poder alcanzar mayoría simple, y con la negativa del PSOE a encontrar pactos para un Gobierno presidido por Pedro Sánchez, no queda otra que el Jefe del Estado nombre a otro candidato, que no tiene porqué ser un diputado. Aquí entra en juego que sea alguien con quien el PSOE pudiera abstenerse finalmente para poder investir a dicho candidato del PP, quien gobernaría en minoría -solo 123 votos a favor- y con constantes búsquedas de apoyos a la hora de sacar proyectos legislativos adelante".
Esta va a ser la fórmula que tanto PP como PSOE elijan para salvar esta legislatura, pues ir a unas nuevas elecciones generales antes de verano, seguramente entre abril y mayo, sería un suicidio político para ambas formaciones que podrían salir más perjudicadas electoralmente frente a las nuevas alternativas políticas, Podemos y Ciudadanos, que cada día son más apreciadas por el electorado.
Como afirma David Muñoz, toca ir deshojando la margarita e ir viendo lo que los partidos van diciendo, pues sabemos que esto puede cambiar en cualquier instante, pero en este momento parece claro que ni Mariano Rajoy ni Pedro Sánchez van a ser los próximos presidentes del Gobierno, y que si el PP, también el PSOE, quieren evitar la repetición de los comicios del pasado domingo, se necesita presentar otro candidato negociado entre ambos partidos para su investidura con los votos del PP y la abstención del PSOE.
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